Se recomienda la ingesta diaria de probióticos, ya que estos cultivos de bacterias beneficiosas de origen natural ayudan a colonizar el intestino. Esto facilita el tránsito intestinal, la absorción de nutrientes y contribuye al bienestar general.

Si has dejado de tomar alguna dosis de probiótico, puede que esta colonización no sea tan efectiva. Retoma el tratamiento lo antes posible

Sí. No nos constatan incompatibilidades de nuestros probióticos con otros productos o medicamentos.

El alcohol puede afectar negativamente a tu microbiota intestinal, por lo que desaconsejamos tomar alcohol si lo que quieres es cuidar tu microbiota. Aun así, si tomas alcohol, recomendamos hacerlo unas horas antes o después de tomarte el probiótico.

Para que veas los beneficios completos, sugerimos tomar nuestros probióticos al menos 2 meses. Así tu cuerpo y microbiota se adaptan bien al cambio. En casos de patologías, tu médico puede aconsejarte un uso más prolongado basándose en tu salud.

Puedes tomar siempre nuestros probióticos, no es necesario hacer descansos. Es un producto natural, sin aditivos ni componentes añadidos artificialmente. Puedes tomar nuestros probióticos de la misma forma que tomarías un yogur cada día. Las bacterias de nuestra microbiota intestinal no son algo que nuestro cuerpo genere, se adquieren a través de la dieta. Los probióticos de EMLIFE son una buena forma de introducir bacterias beneficiosas en nuestro día a día.

¡Sí! Los antibióticos matan bacterias malas, pero también pueden matar las buenas. Por eso y para mantener el equilibrio de tu microbiota intestinal, es recomendable tomar probióticos durante y después de un tratamiento antibiótico. Recomendamos que tomes los probióticos de EMLIFE unas 2 horas antes o después de tomar los antibióticos para evitar que se encuentren en el tracto digestivo y facilitar que las bacterias lleguen en condiciones al intestino.

Recomendamos hacerlo después de la comida, porque es cuando las condiciones del estómago son más propicias para la supervivencia de las bacterias de nuestros probióticos. También puedes tomarlos en ayunas.

Adultos: Toma 30 ml al día, preferiblemente en dos tomas de 15 ml después de comer. Puedes ajustar la toma a tu conveniencia, ya sea en una o dos veces, antes o después de las comidas. Lo importante es cumplir con los 30 ml diarios.

Si un profesional de la salud te sugiere aumentar la dosis, sigue su consejo. No hay riesgo de sobredosis con nuestros probióticos.

Niños (1-12 años): La dosis recomendada es de 15 ml al día. Revisa las indicaciones específicas de cada producto para los niños.

Nuestros probióticos son naturales y seguros para consumo continuo, como un yogur diario. Son una forma efectiva de introducir bacterias beneficiosas en tu dieta.

Los probióticos de EMLIFE no son medicamentos, están clasificados como complementos alimenticios. Son productos naturales sin aditivos o componentes añadidos artificialmente, por eso no es probable sufrir una sobredosis. De todas formas, recomendamos ingerir solo la dosis recomendada.

Recomendamos reducir la dosis en caso de sufrir síntomas digestivos indeseables (hinchazón, gases, irregularidades en el tránsito intestinal) mientras su cuerpo se adapta al probiótico. En caso de sufrir síntomas digestivos severos o reacciones alérgicas, consulte a su médico.

Nuestros probióticos están libres de alérgenos obligatorios y trazas de estos. A pesar de usar bacterias lácticas, no contienen lactosa - su nombre se debe al tipo de fermentación. Los ingredientes son principalmente azúcares, plantas o frutas, así que si no tienes alergias a estos, puedes tomarlos sin problema.

Además, no incluyen productos lácteos ni lactosa, y están libres de gluten, haciéndolos seguros para quienes evitan estos componentes.

Absolutamente, nuestros probióticos son veganos. Utilizamos ingredientes como extractos de plantas y frutas. Aunque las bacterias probióticas se aislaron originalmente de fuentes animales, ahora se cultivan en laboratorios sin emplear productos de origen animal.

Conservarlos siempre en la nevera. No bebas de la botella para no contaminar el producto con bacterias externas. Consumirlos dentro de su fecha de consumo preferente. No los congeles o calientes, eso podría matar las bacterias probióticas. Puedes mezclarlos con una bebida, pero que no supere los 36 °C.

Nada, lo importante es que no quede expuesto al calor, por ejemplo encima de un microondas, o cualquier otra fuente de calor que pueda hacer que el probiótico se active y empiece a generar gas dentro de la botella.

Sí. Eso garantiza un producto fresco y también sus cualidades organolépticas dentro del período de consumo preferente.

La respuesta es sí. Las bacterias de los probióticos de EMLIFE sobreviven a temperatura ambiente. Es más, les encanta. Por eso, cuando el probiótico está a esta temperatura, las bacterias aceleran su metabolismo y fermentan el líquido de la botella. Con este proceso se produce gas y compuestos que, aun siendo beneficiosos para nuestra salud, pueden hinchar la botella y acidificar o avinagrar su sabor. El producto sigue siendo inofensivo y las bacterias están en perfectas condiciones. Así que, si tu probiótico ha estado unas horas fuera de la nevera, no te preocupes, cuando puedas refrigerarlo y asegúrate de consumirlo para notar sus efectos beneficiosos.

Nuestros probióticos están respaldados por varios estudios:

• Análisis nutricionales independientes confirman su contenido en vitaminas y minerales.
• Estudios de la Universidad de Valencia demuestran su capacidad para sobrevivir, resistir y colonizar el intestino, superando a otros probióticos del mercado.
• Estudios científicos avalan la efectividad de nuestras cepas bacterianas patentadas en la salud humana.
• Un estudio clínico fase II realizado por el Hospital General de Catalunya ha probado la eficacia de GUT GO PRO ECO en enfermedades inflamatorias intestinales

En EMLIFE damos mucha importancia a la investigación y desarrollo constante, por eso el departamento de I+D+i analiza, estudia e innova en los probióticos que ya tenemos en el mercado y en la creación de nuevos productos.Para saber si nuestros probióticos son efectivos y de calidad tenemos en cuenta cuatro tipos de estudios:- El contenido nutricional: un laboratorio independiente demostró que los probióticos de EMLIFE contienen vitaminas del grupo B, vitamina C, minerales y postbióticos.- La supervivencia, resistencia y colonización en el intestino: la Universidad de Valencia comprobó que nuestros probióticos superan estas pruebas y, comparados con otros probióticos del mercado, los resultados son muy superiores a los de sus competidores.- La efectividad: las cepas bacterianas escogidas están registradas, patentadas y cuentan con estudios científicos que avalan su efectividad en la salud humana. Además, la Universidad de Valencia demostró que nuestros probióticos son capaces de combatir los patógenos intestinales más comunes (Salmonela, E. coli, etc.).- Estudio clínico fase II: el Hospital General de Catalunya realizó un estudio de GUT GO PRO ECO y demostró que este probiótico es un gran aliado para reducir sintomatología y reducir la incidencia de brotes en enfermedades inflamatorias intestinales como, diverticulitis aguda.Además, la confianza que nuestros probióticos han generado en nuestros clientes y profesionales de la salud es la mejor prueba de su efectividad.

Los probióticos de EMLIFE vienen con una etiqueta que nos indica la fecha de caducidad, 4 meses es el tiempo  que indica de fecha de caducidad de cada lote desde su fabricación. Pero lo que realmente nos está indicando un probiótico natural sin conservantes ni estabilizantes como el de EMLIFE, es que el producto a partir de esa fecha empiezan a bajar la unidades de microorganismos concentrados y empieza una fermentación acética dentro de la botella que nos modifica el gusto del probiótico, pero en cualquier caso el producto sigue estando en buen estado y si queremos podemos seguir tomándolo durante 1 o 2 meses más siempre que el olor del producto no sea desagradable.

Recomendamos el transporte y sobre todo el almacenamiento de nuestros probióticos en frío, ya que contienen bacterias vivas que fermentan a temperatura ambiente. El frío ralentiza su metabolismo para que la fermentación sea más lenta. De todas formas, el probiótico puede estar un tiempo (unas horas) a temperatura ambiente. Lo único que puede pasar es que durante este tiempo las bacterias aceleran su fermentación, produciendo gas y subproductos beneficiosos que avinagran el sabor. Es completamente natural e inocuo, el producto continuará en buenas condiciones y las bacterias vivas y aún más activas. Cuando llegues a tu destino, refrigéralo y no dejes de tomarlo para mejorar tu microbiota.